El 26 de febrero de 2015, la estación de esquí suiza de Zermatt acogió otra edición de la Skiers Cup entre equipos de Europa y América bajo nieve polvo y cielos azules. La 5ª Skiers Cup ofreció buenas condiciones para la competición por equipos de freeski entre Europa y América. El equipo europeo consiguió recuperar el trofeo de la Skiers Cup en forma de bota de esquí. Esto significa que la puntuación global es ahora de 3:2 a favor de los europeos. La Skiers Cup consta de dos partes de competición: La competición de gran montaña, que se celebró lejos de la zona de esquí, y una competición de backcountry slopestyle en la que los esquiadores se enfrentaron virtualmente hombre contra hombre. El ganador respectivo recibía un punto para su equipo. Se celebraron dos rondas, es decir, un total de 18 series como en el slopestyle de backcountry, de modo que se podía conceder un máximo de 36 puntos en ambas partes de la competición. Los fuertes europeos se aseguraron 20 de estos puntos y, por tanto, la victoria en la Copa de Esquiadores 2015...
Después del slopestyle de backcountry, el Equipo de Europa entró en la segunda parte de la competición, el concurso de freeride, con una ventaja de 10 a 8. La competición de gran montaña arrojó el mismo resultado, lo que significa que los europeos terminaron con una clara ventaja de 20:16.
Freeride, 1ª ronda: Anthamatten y Bushfield marcaron la pauta
Debido a las difíciles condiciones de la nieve, los riders tuvieron que prestar mucha atención a dónde podían ir a tope y dónde debían tener más cuidado. Sin embargo, hubo excepciones: El local Samuel Anthamatten (SUI), por ejemplo, mostró a sus colegas una joya oculta en la pista: una brecha que nadie había pensado que fuera esquiable. Con su línea juguetona, el esquiador suizo no dio ninguna oportunidad a su rival y no sólo sumó un punto para su equipo, sino que también recibió un aplauso extra de ambos equipos. El francés Loïc Collomb-Patton también realizó una carrera excepcional contra Sage Cattabriga-Alosa, de Estados Unidos. Como es conocido por Loïc, el francés esquió una línea muy fluida, a todo gas, sin el más mínimo error. Sin embargo, la carrera más rápida e impresionante del día fue para el canadiense Rory Bushfield. A los jueces y espectadores les pareció que la pista había sido diseñada especialmente para el canadiense. La primera ronda terminó 5:4 a favor de los europeos, dejando a los estadounidenses un punto más atrás - en total, el marcador ya era 15:12 a favor del equipo europeo.
Ronda 2
La desventaja pareció motivar aún más a los estadounidenses: El capitán de su equipo, Seth Morrison, dio la campanada en la primera manga con su típico backflip y se impuso al capitán del equipo europeo, el francés Julien Regnier. En las dos series siguientes, sin embargo, los pilotos que sustituyeron a los europeos lesionados Sven Kueenle (GER) y Richard Permin (FRA) se llevaron los puntos: Primero brilló el cofundador de la prueba, el sueco Kaj Zackrisson, y después Nicolas Salencon (ARG/FRA) mostró un estilo libre insuperable. En las rondas 4 y 5, los estadounidenses contraatacaron de nuevo con Sage Cattabriga-Alosa y Logan Pehota. Con unas líneas irresistibles, derrotaron a los fuertes europeos Sam Anthamatten (SUI) y Sam Favret (FRA). Tanner Rainville, de Estados Unidos, acercó aún más al Equipo de las Américas al vencer a Nicolas Vuignier, de Suiza. De repente, sólo quedaban 17:16 a favor de Europa. Andy Mahre (EE UU) y Fabien Maierhofer (FRA) mantuvieron la tensión e intensificaron su juego en el que probablemente fue el duelo más igualado del día. El punto fue para el francés. En la siguiente manga, Rory Bushfield se jugaba el todo o nada. Pero Loïc Collomb-Patton (FRA) también demostró todas sus habilidades en su segunda manga y dejó claro por qué es el vigente Campeón del Mundo del FWT. Bushfield, por su parte, se estrelló tras un backflip. Así pues, la decisión se decantó a favor de los europeos. Dana Flahr (EE.UU.) y Sverre Liliequist (SWE) decidieron por tanto celebrar su carrera juntos. Liliequist se aseguró de coronar la prueba con un hermoso frontflip poco antes de la meta.
