Ya se había anunciado la semana pasada, así que el comienzo de la primavera nos llevó al norte, a Furano y Kurodake. Un viaje arduo, pero del que no nos arrepentimos.
El lunes fue una continuación del gran domingo con mucha nieve buena lejos de las pistas. Sin embargo, la subida de las temperaturas no auguraba nada bueno.
Martes y miércoles fueron dos días de planificación de nuestro viaje al extremo norte de Japón. Mientras tanto, mis colegas hicieron algunas excursiones e informaron de todo, desde lo no tan bueno a lo super bueno.
El jueves, a las intempestivas 5 de la mañana, tocaba emprender el viaje a Hokkaido. En primer lugar, un viaje de 3,5 horas hasta Niigata, donde cargamos nuestro coche y cinco pasajeros en el ferry. Después, 18 horas en el ferry, a las que sólo se puede sobrevivir durmiendo mucho, bebiendo mucha cerveza y viendo buenas películas en el portátil. Llegamos a las 4 de la mañana y directamente a la estación de esquí de Furano, donde hicimos nuestros primeros giros en nieve polvo poco después de las 8 de la mañana. Volvimos directamente a Furano el sábado, ya que aún quedaba mucha nieve ligera sin pisar. La nieve aquí en el norte es sin duda la mejor que se puede encontrar.
Nos dimos un pequeño lujo y reservamos en el hotel Prince. Brillante hotel, sin duda la cama más cómoda desde Navidad con un edredón acogedor como en casa, un desayuno buffet que no podría ser más grande y la góndola justo en la puerta. Si alguna vez vienes aquí, deberías pedir un paquete en el Hotel Prince. Hacen ofertas con las que ni siquiera un albergue barato puede competir. Por menos de 70 euros, puedes conseguir un forfait, una noche en habitación doble, acceso gratuito al onsen, desayuno buffet libre, Internet gratuito, servicio gratuito de transporte desde el aeropuerto, etc. y mucho más. Ahora parece un anuncio, pero hay que decirlo... Una relación calidad-precio brillante como en ningún otro sitio.
El domingo viajamos a Kurodake, a poco menos de tres horas. Una zona que es más conocida por el turismo de verano, pero se dice que es un sueño para los freeriders. No podemos asegurarlo, ya que encontramos muy poca nieve y toda la capa de nieve consistía en nieve tipo azúcar, lo que hacía casi imposible cualquier descenso. Fue un fracaso total, pero pudimos reconocer el potencial de la estación. Pongámosla en la lista para el año que viene y volvamos a probarla.
Los próximos días prometen nieve polvo, al menos en pequeñas cantidades y con un poco de suerte un poco más de ella. Nos quedaremos en Hokkaido otra semana y viajaremos a algunas zonas conocidas, pero también a algunas nuevas.
País y gente
Sobre las preguntas de la semana pasada
CharlyBrown: Hay muchos menos turistas en Japón que hace un año. Fukushima es un desastre para el turismo. Hokkaido en particular está sufriendo hasta un 50% menos de turistas. El bombo mediático de la catástrofe es responsable del descenso. Esto se debe a que Hokkaido está muy lejos de la central nuclear y las lecturas son más bajas que nunca, o al menos no más altas de lo habitual. El año que viene debería volver a mejorar. Las zonas que están más cerca de la central nuclear están realmente muy afectadas y se debaten entre la amenaza de quiebra.
Knut Romantic love stories: Estaría bien, aquí no pasa nada, nada de nada y las japonesas no son precisamente relajadas a la hora de ligar en vacaciones. El matrimonio es más probable... J
Tobi:¡Buena entrevista con Miles Clark! Tendremos más fotos con él en la semana 10. Pasamos un tiempo juntos en la nieve en Hokkaido.
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