Por suerte, el viaje no siempre es el destino. Viajar más de 40 horas en aviones, trenes y terminales puede resultar bastante agotador a la larga. La única pregunta que nos queda es si merece la pena el esfuerzo de ir a empolvarnos a la lejana Nueva Zelanda en el verano europeo...
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Nueva Zelanda - Donde los sueños se hacen realidad (Trailer) from Kai Stoeckel on Vimeo. Rara vez nieva hasta la autopista aquí en Nueva Zelanda, y hoy es el caso. Afortunadamente, poco después de nuestra llegada, una baja antártica está en camino. Buenas condiciones para hacer una visita a los campos del club local, las raíces del esquí en Nueva Zelanda. "Acceso a Broken River Skifield", esta señal de tráfico en la autopista nos conduce directamente a nuestra primera aventura. Una pista de grava de un solo carril, al principio llena de baches, más tarde llena de nieve y hielo, serpentea abruptamente a través del denso hayedo. Alrededor de 10 vehículos de fanáticos de la nieve con ideas afines están estacionados en el aparcamiento, según el resto de los presentes, ¡un "día ajetreado"!
Cascanueces
Un remonte lleva directamente al borde del bosque, donde un puñado de cabañas de madera están listas y esperando como alojamiento. A cinco minutos a pie del remonte, nos esperan los infames remontes Cascanueces: una cuerda sube directamente por la montaña a lo largo de varias poleas montadas sobre soportes, a menudo accionadas por un tractor desechado. Se engancha la cuerda al cascanueces metálico, que se sujeta a un cinturón con una cuerda, y se puede subir rápida y fácilmente. Lo que en teoría parece sencillo, en la práctica lleva unos cuantos intentos... A pesar de los enormes esfuerzos de todos los presentes, no conseguimos seguir todas las carreras. Positivamente impresionados por la cultura de los clubes, pasamos los siguientes días y semanas en Broken River, Craigieburn Valley, Mt Olympus y Roundhill. La amabilidad del personal, la variedad de terrenos de primera clase, la ausencia de pistas preparadas y la vitalidad de la cultura de la nieve profunda son de primera clase. Los pocos esquiadores y snowboarders con los que se comparte la nieve son también de nuestro gusto. Las estaciones de esquí como deben ser, reducidas a lo esencial.
World Heli Challenge
Después de las dos primeras semanas, llegó el momento de recoger nuestras tiendas en Canterbury y dirigirnos al lago Hawea. Eric y Johannes participan allí en el World Heli Challenge. Muchos de los mejores atletas internacionales se dan la mano aquí, Travis Rice, Ane Enderud, Aline Bock, Andy Finch y muchos más reparten el pan del desayuno en la misma mesa. El Hotel Lake Hawea es ahora nuestro hogar durante una semana, un alojamiento extremadamente acogedor y un cambio que necesitábamos desde hace tiempo de nuestras mini autocaravanas. Al lugar del concurso se llega en helicóptero. El "Freestyle Day" se convierte en una sesión de kicker debido a las malas condiciones de la nieve, pero el siguiente "Extreme Day" tiene lugar en condiciones ligeramente mejores. Mientras Johannes, con el número de salida 1, tiene muy poco tiempo para inspeccionar la pista y realiza una bajada de seguridad casi a ciegas, Eric ofrece una actuación digna de ver. Para asombro de muchos de los presentes, los jueces "sólo" le otorgan el séptimo puesto.
La carrera de Eric
Sin título de Kai Stoeckel en Vimeo.
Por otro lado, el programa social hizo que los momentos fueran más felices. Ya fuera surfeando en la Costa Oeste o en el rally de coches de carreras, ¡fueron unos días muy divertidos con gente muy divertida! El viaje a Nueva Zelanda mereció la pena. Texto: Sebastian FischerFotos: Kai Stöckel, Sebastian Fischer, Eric Zeller
