He estado probando las nuevas de Uvex desde mediados de diciembre (2014) y estoy absolutamente encantado. Cualquiera que me conozca como probador sabe que siempre tengo algo de lo que quejarme y muy pocas veces doy la máxima puntuación. Y las Snowstrike VT prometen mucho, pero también cumplen con creces.
Primera impresión
La primera impresión no difiere de la de cualquier otro par de gafas. Sólo en un segundo vistazo te das cuenta de la pequeña electrónica en el lado derecho de las gafas. Súper pequeña, discreta e insignificante en términos de peso. No hace falta ser un genio de la tecnología para manejar las gafas. Un pequeño botón situado en la parte inferior de la electrónica permite ajustar todos los parámetros. Haga doble clic para cambiar el color (transparente, azul, rojo y violeta). Basta con hacer clic para cambiar las gafas de claro a oscuro o pulsar durante unos segundos y se activa la función automática, que pasa de claro a oscuro en tan sólo 0,1 segundos en función de las condiciones de luz.
Prueba práctica
Probé las gafas en todas las condiciones imaginables en Japón: desde la nevada más intensa hasta el frío glacial o la nevada pegajosa súper húmeda, pasando por el sol cálido y primaveral y muy brillante. Oficialmente, el oscurecimiento de las gafas se especifica de S1 a S3 (en una escala de S0 a S4, donde S0 es cristal claro y S4 es cristal para sol muy fuerte), lo que sin duda puedo entender. Soy MUY sensible a la luz y me gustaría un tinte más fuerte cuando hace sol.
Se supone que la batería dura 30 horas y luego se carga por USB durante cinco horas. Hasta ahora no he podido averiguar si hay una advertencia de batería baja. Un parpadeo ocasional del tinte sería ciertamente útil si, por ejemplo, todavía quedan cinco horas.
Ahora a los otros datos clave (texto original de Uvex complementado por mi impresión).