Conocido como un reputado destino de deportes de invierno con una larga tradición, Davos atrae no sólo a esquiadores y snowboarders, sino también a las personalidades más influyentes de la política y los negocios a través de su Foro Económico Mundial anual. Esta combinación de belleza alpina y reunión mundial hace de Davos un destino único que atrae tanto a los amantes de la naturaleza como a los cosmopolitas.
Pero, ¿qué ofrece Davos a los freeriders? Exploramos esta cuestión aquí y la analizamos desde la perspectiva tanto de un freerider experimentado como de un completo principiante.
Un sorprendente punto de acceso para el freeride
En mi mente, Davos era sinónimo de la clásica estación de esquí y balneario suiza, que se centra más en el estilo de vida, la gastronomía y menos en el componente aventurero en la montaña. Pero esta suposición resultó ser una falacia. Desde el punto de vista deportivo, Davos ofrece un sinfín de oportunidades para desahogarse durante todo el día, sobre todo en el ámbito del freeride.
Con seis ferrocarriles de montaña diferentes - Parsenn, Jakobshorn, Rinerhorn, Strela/Schatzalp, Madrisa y Pischa - el destino turístico Davos/Klosters ofrece una enorme variedad de oportunidades para explorar las montañas, la naturaleza y la nieve en todas direcciones. Lo que hace que Davos sea tan especial es la accesibilidad del terreno, ya que se encuentra a 1.500 metros sobre el nivel del mar, lo que permite iniciar excursiones de esquí o splitboard directamente desde la estación prácticamente durante todo el invierno.
El terreno en sí es particularmente notable: En comparación con otras regiones alpinas de los Alpes, donde predomina el terreno escarpado y a menudo rocoso, es mucho más espacioso y, por tanto, fácil de ver. Esto es bueno tanto para el ascenso como para el descenso y también es apto para principiantes. Nos gusta la amplitud de las pistas y la pendiente uniforme, que facilita la exploración del terreno y ofrece unas vistas impresionantes de la naturaleza en todo momento. Pero no se preocupe, Davos bien merece un viaje para los más experimentados.
La animada escena del freeride, formada en gran parte por lugareños que se conocen entre sí, ofrece una cálida bienvenida y transmite un sentimiento de pertenencia. Esta conexión local contribuye a crear un ambiente único y convierte a Davos en un punto de encuentro para los amantes del freeride que buscan pistas vírgenes y una comunidad de personas con ideas afines.
Para los más experimentados, vale la pena viajar a Davos.